Desde LexUp Soluciones os presentamos un caso que tuvimos la oportunidad de defender en juicio hace apenas unos meses. La historia comienza con el accidente laboral que sufrió un albañil mientras estaba subido a una mesa colocando cinta de carrocero y, de repente, sufrió una caída precipitándose al suelo desde una altura de 80 centímetros aproximadamente.
Inicialmente el albañil no tenía ninguna lesión más allá de un golpe en el hombro y la cabeza. Se le detectó un hematoma que al poco tiempo desapareció, y un TAC craneal no arrojó lesiones relevantes.
Unos días después del accidente el albañil se negó a someterse a más revisiones médicas, alegando fuertes dolores de cabeza y negándose a recibir tratamiento. A partir de entonces, fingió tener amnesia retrógrada y pérdida de memoria, con su mujer actuando como intérprete y afirmando que él no hablaba español y que el golpe había empeorado su capacidad de expresión.
A continuación, la empresa se encontró con múltiples procedimientos judiciales derivados del accidente de trabajo. Así las cosas, la empresa se puso en contacto con David Sánchez Martín, abogado laboralista y fundador de LexUp Soluciones, para encomendarle su defensa en un caso tan complejo y de importante repercusión económica.
Reconocimiento de Incpacidad Permanente
El médico de la mutua certificó la dolencia del trabajador, y la Seguridad Social le reconoció la incapacidad permanente absoluta con una pensión de 2.700 euros mensuales, además de 330 euros al mes para su mujer por cuidarlo. Sin embargo, el albañil solicitó una pensión por gran invalidez de cerca de 5.000 euros al mes, la máxima prestación para personas que necesitan ayuda para vestirse o alimentarse.
Ante estas aspiraciones, la empresa para la que trabajaba, asistida del letrado David Sánchez, decidió contratar a un detective para investigar el caso. Las imágenes grabadas por el detective mostraban al supuesto inválido caminando tranquilamente con su mujer, con un paso ligero y conversando animadamente. Se les veía pasear varios kilómetros de la mano en un aparcamiento apartado.
El Juicio
Con estas pruebas, la empresa impugnó la baja permanente por invalidez. Llegó el día del juicio en el que se debía decidir si se mantenía la baja o se concedía la pensión de gran invalidez.
El albañil se presentó al juicio en silla de ruedas, representando su papel de “gran inválido”. El fundador de LexUp Soluciones, David Sánchez Martín, se sirvió de las imágenes presentadas ante el juez para poner de manifiesto las contradicciones del trabajador, que apenas un mes antes estaba caminando perfectamente durante varios kilómetros mientras hablaba con su mujer. De hecho, el letrado señaló que el demandante había acudido a juicios anteriores por su propio pie, sin necesidad de utilizar una silla de ruedas.
Los Resultados
Descubierto el fraude del trabajador, las consecuencias de tal escándalo no se hicieron esperar y, finalmente, el Juzgado de lo Social de San Sebastián dictó sentencia dando la razón a la empresa: se declaró la nulidad del expediente administrativo que había reconocido la incapacidad permanente, concluyendo que el albañil había «simulado una enfermedad que no tenía» para accederindebidamente a prestaciones sociales.
El juez también dedujo testimonio a petición de los letrados de la empresa y de la mutua para que investigara al albañil por estafa. Además, se ordenó remitir la sentencia a los Servicios Sociales de Guipúzcoa para que se le retirara el 97% de minusvalía y se paralizara inmediatamente su pensión. Se le obligó a devolver todo el dinero percibido durante esos meses, cerca de 50.000 euros.
Gracias al asesoramiento y asistencia del experimentado abogado laboralista David Sánchez Martín, socio fundador de LexUp Soluciones, la empresa quedó exenta de cualquier tipo de responsabilidad y evitó las gravosas consecuencias económicas que pretendía el trabajador con su artimaña.
Fuentes:
